“El inconveniente es cómo se paga la baja de inflación, con mucha recesión”


La inflación de febrero quedó en el promedio nacional del 13,2% y el NEA en el 10,9% (siendo la región con menor índice de precios al consumidor según el INDEC). Sin embargo, en las góndolas, los alimentos suelen medir de manera diferente al conjunto de rubros de consumo que se mide mensualmente.

Para el empresario del rubro alimenticio, Carlos María Beigbeder, la suba de precios promedio le dio 15% el mes pasado. “En las góndolas estuvo cerquita, nos dio 15%. Pero estuvo bastante bien: es un desastre pero vamos para una inflación de menos de dos dígitos para dentro de unos meses”, arriesgó.

Sin embargo, el expresidente de la Cámara de Comercio e Industria de Posadas (CCIP), advirtió en el programa Primera Plana que se emite de lunes a viernes de 18 a 20 por FM 89.3 Santa María de las Misiones y canal 9 Norte Misionero, que “el inconveniente es cómo se paga ese achique o baja de inflación, con mucha recesión que la vemos más todos los días”.

“Festejo que queramos convertirnos en un país normal pero no festejo que sea a costa de la recesión. Eso se nota en las góndolas donde la gente, lo último que hace, es dejar de consumir alimentos. Pero ahí también se va notando la recesión con la caída en las ventas de más del 30%”, sentenció el dirigente empresario.

 

Productos que más subieron

Beigbeder detalló que “hoy una botella de champagne está más barata que una de aceite de oliva. Ese producto se ha vuelto prohibitivo con los aumentos que tuvo desde diciembre del año pasado hasta ahora. Es imposible poder ponerle a una ensalada de tomate y lechuga un chorro de aceite de oliva que te va a salir más caro que las verduras”.

A su vez, explicó que “los productos derivados de aceites vegetales han subido mucho, las aceitunas, productos diluibles de limpieza como los que se utilizan para pisos; los pañales, cremas que están por arriba del 600% interanuales. Ahora se cae el consumo y, algunos, van a empezar a descender de precio”.

El extitular de la CCIP fue consultado sobre la posible importación de productos alimenticios que habilitaría el Gobierno nacional, al no ver que las empresas argentinas bajen los precios. Al respecto, opinó que “hay ciertos productos que ya son importados como los llamados pescados azules (atún, caballa, etc). Hay muchos enlatados que son importados y esto es para asustar un poco. Que el industrial se asuste y baje los precios es bueno”.

 

“Veo al industrial argentino bajando los precios, no por la amenaza del Gobierno sino porque se le caen las ventas. Ya están al 30% del objetivo mensual y no van a aguantar mucho más. Es una cuestión de tiempo”, sostuvo.

 

“No creo que la baja de tasa de interés repercuta en el dólar”

El empresario alimenticio y dirigente de la CCIP, Carlos María Beigbeder, opinó sobre la reciente medida del Banco Central de bajar las tasas de interés y dejar que financieras y bancos las fijen en libre competencia. Ayer, la mayoría ya ofreció porcentajes menores al 80 y lejos de aquel 110% de apenas 24 horas antes. Siempre que el exministro Sergio Massa fue incrementando los valores, lo hizo ante una disparada del dólar blue, para evitar una “sangría” de reservas en el Banco Central.

Ahora, el ministro Luis Caputo arriesgó el camino contrario y dejó abierta la incógnita sobre qué pasara con la moneda norteamericana a partir de la menor tasa de oferta para plazos fijos.

Beigbeder no cree que estén dadas las condiciones “para que la baja de tasa de interés repercuta en el dólar. Si querés un país con menos inflación tenés que bajar la tasa. Si queremos tender a ser un país normal, eso debe suceder. La gente no va a volver a elegir al dólar nuevamente”.

 

El caso de la Coca Cola

Ayer se conoció la noticia de que en algunos supermercados y mayoristas bonaerenses y del AMBA se ofrecían botellas de Coca Cola en oferta, “para evitar que se pudran en las góndolas” por la menor venta.

Beigbeder confirmó que puede suceder y el plazo que manejan los comercios. “Es verdad que se pueden pudrir en las góndolas. Tenés una vida útil de 60 días para que mantenga las mismas propiedades desde la salida de la fábrica. Este es un producto que se puede empezar a poner viejo en las góndolas, lo mismo va a suceder con otros”, explicó.

En ese sentido, aprovechó para hacer un llamado a los generadores de precios y grandes proveedores de alimentos para que bajen los valores de los productos.

Dijo confiar que “los productos van a tener que empezar a bajar porque se les va a caer el consumo. Hay fábricas que no entiendo bien qué es lo que quieren hacer porque la gente, a la que no le alcanza el dinero o prefiere gastarlo en otras cosas, va a dejar de consumir ciertos productos por los precios”.

Finalmente admitió que algunos productos en Paraguay están en mejor precio pero negó que vaya a producirse un consumo masivo del otro lado del puente. Y pidió al consumidor que compare la calidad de los productos.

 

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