La Facultad de Ciencias Económicas con “dificultades en algunas áreas” de cara al 2024


El Gobierno nacional oficializó este miércoles que prórroga el Presupuesto 2023, es decir, que el presidente Javier Milei no contará con uno propio, como se avizoraba.

La medida adoptada golpea de lleno en todo los sectores y en las provincias, ya que recibirán recursos que no se condicen con la actualidad económica, con una inflación interanual arriba del 160%.

En el sector de la educación universitaria, el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) que maneja la caja de las universidades públicas del país, mandó a la Secretaría de Educación un presupuesto para el siguiente año de 2,5 billones de pesos (300% de aumento respecto al de 2023). Sin embargo, con este decreto, es muy probable que dicha aprobación no vea la luz, lo que abre un escenario desalentador para la educación pública universitaria. 

 

Afectación en becas y salarios 

En Misiones, el decano de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Misiones (UNaM), Horacio Simes, manifestó su preocupación sobre los recursos que llegarán. Apuntó que “tendríamos dificultades en algunas áreas porque no estaríamos contemplando todo el proceso inflacionario que hemos vivido a lo largo de este año”.

En comunicación con la FM 89.3 Santa María de las Misiones, advirtió que con un presupuesto atrasado a la actualidad económica, “observaríamos algunas dificultades en el funcionamiento de uno de los servicios básicos como es el comedor universitario, que insume gran parte de nuestros recursos mensuales, solo en insumos. Y también se podría tener dificultades para el pago de salarios”, alertó.

Igualmente, dijo que “todo depende de si se prorroga el presupuesto tal y como está, o se tienen en cuenta los incrementos que se fueron dando a lo largo del año, para sueldos principalmente”.

Así como todo los sectores, Simes explicó que el sector educativo transita por la incertidumbre y eso afectaría el inicio de las actividades académicas en el inicio del 2024, “porque desconocemos cuál va a ser la partida presupuestaria del año que viene, por lo cual no podemos planificar actividades”.

A esto sumó que “a partir de los primeros días de febrero iniciamos las actividades académicas y debemos proyectar los ingresos, gastos, de apoyo en general y mantenimiento de la infraestructura (limpieza, seguridad) que no se frenan durante el recesos, y deberíamos tener un poco más de claridad para empezar a proyectar y tomar decisiones”, advirtió el decano.

Reiteró que, si se da el ajuste presupuestario sin modificaciones, “el panorama no es alentador”, ya que podrían peligrar los recursos destinados a las becas para que los universitarios acceden a los albergues, a comedores, a apuntes, a estudios, y otros beneficios con los que cuentan los estudiantes de Misiones y que facilita el acceso a la educación pública y gratuita, y de calidad.

“Estudiar tiene un costo y va en incremento, tiene un costo para todas las familias misioneras porque suben los alimentos, los alquileres, el combustible y los salarios no se condicen con el nivel de aumento que corresponde, ya hace un tiempo, y esto afecta a un derecho esencial que es el derecho a la educación, que es la principal herramienta para el progreso personal y social”, explicó Simes.

 

Balance 2023

Por otra parte, el decano de Ciencias Económicas explicó que “cerramos este año muy conformes con el conjunto de actividades y resultados que hemos obtenido”. Estos logros, “nos permiten observar un crecimiento en nuestra facultad, en base a los objetivos que nos habíamos propuesto al inicio de la gestión y que habla de la necesidad de tener una facultad con eficiencia académica, que nos caracteriza, pero también con impacto social y cercanía con nuestros estudiantes”, resaltó Simes.

En ese sentido, resumió los objetivos que pudieron lograr en el plano académico: como la implementación de nuevas carreras de pregrado, destacando la que se cursa en formato híbrido “para avanzar en la cuestión tecnológica y la educación a distancia”, afirmó.

Además, la implementación de salas para nuevas carreras de grado, cursos cortos para ejecutivos, y las que son 100% virtuales para el sector privado, público y la población en general.

“Hemos reforzado los servicios de atención integral a los estudiantes a través de nuestro programa de AyATE (Área de Apoyo y Acompañamiento a las Trayectorias Educativas). Hemos reforzado las actividades deportivas y recreativas, y por supuesto nuestra infraestructura y demás servicios”, cerró.

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