El Ejecutivo municipal de Oberá deberá rendir cuentas por el deficiente servicio del transporte urbano


El drama y el pesar por el deficiente servicio de colectivo urbano en Oberá suma todos los días una arista nueva, que afecta a miles de usuarios del transporte, en manos del Grupo Z.

Los obereños hoy son rehenes de la empresa concesionaria del servicio pero, a diferencia de los usuarios de Posadas, Garupá y Candelaria, donde hay mucha pasividad para reclamar por un sistema eficiente, en Oberá el enojo ciudadano aflora cada vez más y toman medidas.

En ese marco, las repetidas quejas llegaron a oídos de los concejales Mara Frontini y Marcelo Gazzo, del Bloque PRO – Juntos por el Cambio, que se metieron de lleno en el tema y tomaron cartas en el asunto.

Luego de 25 días de ser ignorados por el Ejecutivo municipal de Pablo Hassan, en la jornada de ayer obtuvieron la aprobación de un pedido de informe, para que el municipio dé respuestas a las preguntas por el paro de colectivos del 1 de septiembre que dejó a la deriva a los obereños:

¿Cuál fue el motivo del paro?; ¿Cuáles fueron las sanciones o infracciones que le realizaron a las empresas de transporte Next y Guacurarí?; ¿El Ejecutivo municipal estaba al corriente de este paro?; ¿Cumplirá el municipio la sanción estipulada en la Resolución 251 (Regímenes de Infracciones)?

PEDIDO DE INFORME. Luego de 25 días, ayer se aprobó la presentación de los ediles para que el Ejecutivo municipal dé repuestas sobre el deficiente servicio de transporte urbano. Todavía no tuvieron respuestas. 

“Hoy ya son 26 días que no obtenemos respuestas” 

En comunicación con la radio de PRIMERA EDICIÓN, la concejal Mara Frontini explicó que “hay muchísimos reclamos, hay muchas irregularidades de este servicio nuevo”.

En un número de Whatsapp, que pusieron a disposición de los obereños, “tenemos lleno de reclamos contra estas empresas de transporte urbano”, sumó.

La edil contó que “el 1 de septiembre realizaron un paro, sorpresivo para la gente y de pronto, las personas querían ir al escuela, al trabajo y no tenían servicio hasta las dos de la tarde. Ese mismo día presenté una nota al Ejecutivo municipal para que me explique cuál fue el motivo del paro de colectivos y cuáles va a ser las medidas de sanción a la empresa. No obtuve ninguna respuesta”. Seguidamente, luego de unos días, junto al concejal Gazzo “como Bloque, hicimos nuevamente una nota al Ejecutivo municipal pero complementamos con un pedido de informe para que ingrese también al Concejo Deliberante”, adicionó.

En dicho pedido de informe, que aprobaron recién en la sesión ordinaria de este martes, “le hacemos (a la Comuna) cinco preguntas que estamos esperando que respondan, porque hoy ya son 26 días que no obtenemos respuesta”, afirmó Frontini.

Mencionó que en la Resolución 251 del Ejecutivo obereño se establece penas contra la empresa de transporte de hasta 15 mil VTB (Valor Tarifario del Boleto) por cese parcial de servicios y la prestación irregular del servicio, es decir, por paros sorpresivos, o suspender líneas y frecuencias, como está ocurriendo en este momento en la ciudad obereña.

BLOQUE. Los concejales Mara Frontini y Marcelo Gazzo recibieron cientos de quejas de los usuarios y decidieron intervenir.

En ese sentido, alertó que “hay más de 30 actas de infracciones, solo actas, pero la sanción en sí no se está ejecutando”, dijo. Y esperan, a través del pedido de informe, acceder al registro de todas las actas de infracciones que han realizado a estas empresas. “Quiero constatar de que es cierto”, dijo.

Frontini destacó que “lo que yo quiero es que se solucione el problema para los obereños”, y dio cuenta de los innumerables reclamos de los usuarios a la oficina de Movilidad Urbana, a cargo de Fabián Pizzuti, pero que “no obtienen respuestas, por eso acudieron a mí”, dijo.

Además, mencionó otra falta cercana de la empresa de transporte urbano: el recorte de frecuencias de la línea 2-B, que lleva a usuarios del barrio 180 Viviendas a la zona céntrica de Oberá.

Sobre esto dijo que “ayer hubo un reclamo generalizado de usuarios por esta línea específica. Esta línea recortó la frecuencia, entonces las personas llegan tarde a las escuelas o como están llenísimos los colectivos, no llegan a la escuela. También, los empleados del hospital SAMIC, van pero llegan con tardanza, entonces les sacan el presentismo. A muchos de ellos, por ejemplo, el presentismo les representa $45 mil, que necesitan y no los va a tener, y no porque no cumplan sino porque el sistema de transporte urbano no los ayuda a llegar a su trabajo en horario”, cerró.

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