BRILLANTE. Miguel Cavallero construyó un verdadero éxito en el ambiente de Quito con su emprendimiento Cava Studios Peluquería, pero quiere volver.
Como a la mayoría de las personas, esta pandemia por el coronavirus obligó a Miguel Cavallero, un misionero nacido en Apóstoles, a repensar su futuro, ya que se encuentra desde hace varios años en Quito (Ecuador), donde en base a mucho esfuerzo consiguió abrirse paso con su emprendimiento “Cava Studios Peluquería” y alcanzar el éxito, pero que ante esta situación sanitaria extrema ya analiza su regreso a la tierra colorada.
“Llevo aproximadamente 25 días en cuarentena”, comenzó diciendo Cavallero al programa “El Aire de las Misiones” de la 89.3 FM Santa María de las Misiones, y agregó que “el primer caso, que fue importado, se conoció el 14 de febrero en Guayaquil, que es la ciudad más afectada. El Gobierno fue tomando medidas todas las semanas, que fueron cambiando. De hecho, una de las partes que más me afecta es la laboral, porque como empresario tengo empleados. Hace dos días que me vengo reuniendo con mis abogados para ver qué medidas vamos a tomar con relación al personal que tenemos y demás. El Gobierno te da directrices pero en realidad en cierto modo hace que el empresario negocie con sus empleados las diferentes medidas. Pero es todo muy incierto”.
Para Cavallero, uno de los motivos principales por los cuales el coronavirus golpeó con dureza a Ecuador es que “al principio nadie tomó conciencia de lo que estaba pasando, de hecho uno de los contagios más grandes que hubo fue en Guayaquil a través de un casamiento, donde la madre de la novia vino desde Italia contagiada sin saber y allí se contagiaron todos los invitados. Es una de las familias más ricas del país, entonces se contagió toda la clase social alta de esa zona. Lo que se ve en las noticias es poco para lo que realmente está pasando en Guayaquil”.
En cuanto a Quito, donde vive Cavallero, señaló que “el alcalde tomó rápidamente las medidas y la gente fue más precavida, todo el mundo se puso a hacer cuarentena, nadie salió de las casas y por ende son muchos menos los casos. Si bien hay contagios, son personas que se hacen el análisis, pero se sabe que hay otros que murieron y que no se hicieron el test y no se contabilizan esas muertes por coronavirus. Ayer las redes sociales se inundaron con la imagen de un doctor muy joven de Quito que se murió contagiado trabajando”.
Consultado si -como se ve en las noticias- no alcanzan los ataúdes de madera para dar sepultura a los muertos en ese país y les entregan cajas de cartón para ello, Cavallero confirmó que “esa es la situación real de Guayaquil, el Gobierno trata de no mostrar las imágenes o los números tan crudamente porque la población puede entrar en crisis y perderá el control”.
Luego agregó que “hace dos semanas hay toque de queda a nivel nacional, desde las 2 de la tarde no podés hacer absolutamente nada. Podés ir al supermercado, algunas sucursales del banco están abiertas y a las farmacias. Recién hace una semana se abrió la venta de delivery de comidas”.
Sobre la posibilidad del levantamiento de la cuarentena, opinó que “el primero de mayo, ya lo anunció el Gobierno, habrá un ‘semáforo’ para medir dónde hay más contagios. Sabemos que Guayaquil estará cerrado de por sí, porque es donde hay más casos de contagio. Pero en la capital tenemos la esperanza de que el 1 de mayo empecemos a abrir en ciertas áreas laborales”.
Volver a estar con sus afectos
En otro tramo de la charla, se le planteó a Miguel Cavallero si se le cruzó la idea de regresar a la Argentina o se quedará allí en Quito. Y él se quebró al responder que “es un tema que me tiembla la voz cuando pienso en esto. Hace quince años que estoy fuera del país y lo que está pasando me está haciendo replantear mi vida hacia adelante”.
Inmediatamente agregó el apostoleño que “creo que voy a priorizar otras cosas cuando pase todo esto y una de ellas es que quiero volver a estar más cerca de mi familia. Ahora tengo dos hermanos trabajando acá conmigo este año. Pasé Navidad en Argentina y cuando tomé el avión en Ezeiza para volver a Ecuador les dije a mis hermanos que este es el último año que hago el esfuerzo para estar lejos”.
“Siempre dije ‘quiero regresar’, pongo en la balanza y digo ‘acá gano en dólares y allá en pesos’. Sin embargo ahora quiero priorizar estar más cerca de mi familia, de mi madre, que está en Apóstoles”, reconoció.
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