Como se preveía, el pago de los haberes a agentes activos y pasivos de la administración pública provincial desató un intenso movimiento de personas en torno a los cajeros automáticos de Posadas y larguísimas colas esperando turno para sacar dinero.
En plena pandemia de coronavirus y con el aislamiento preventivo obligatorio en vigencia, el Banco Macro había arbitrado todos los medios digitales y otras medidas disuasivas para que los usuarios no se agolparan ayer ante las máquinas de ATM.
También el Banco Central había puesto de su parte, al establecer que las extracciones sean gratuitas en cualquier cajero, sin distinción entre clientes y no clientes de cada entidad o cada red bancaria, para “descentralizar” un poco la afluencia de personas.
Sin embargo, nada de esto fue suficiente y los misioneros acudieron en masa a los lugares habituales para extraer su dinero, como se pudo verificar tanto en los puntos céntricos (en la plaza 9 de Julio y en las inmediaciones de las sucursales de un popular supermercado) como en la periferia. Más de una cuadra de fila en Villa Cabello y cientos de metros en el cajero junto a un mayorista de la ruta 12 fueron dos de los más concurridos.
Esta situación, no obstante ya había sido prevista por las autoridades provinciales, que desplegaron un amplio operativo de fuerzas para organizar las largas filas y asegurar el distanciamiento social -de al menos un metro- entre cada usuario.
Además, cientos de voluntarios enrolados en la campaña “Misiones Solidaria” trabajaron ayer de manera coordinada para acompañar con prácticas de bioseguridad en los cajeros automáticos de Posadas, Oberá, Eldorado y Puerto Iguazú.
Así -con todos los elementos de protección, como barbijos y guantes, y la correspondiente autorización- brindaron las medidas de higiene como uso de alcohol en gel entre las personas y la desinfección de las terminales de cobro.
En cuatro ciudades
En Posadas estuvieron en la avenida Uruguay, en la chacra 32-33, en Villa Cabello, en el hipermercado, en la capilla San Ramón, en el hospital, en Itaembé Miní, en Tacuarí y Aguado, en avenida 115 casi Urquiza (chacra 190) y en Lavalle y Andresito.
Además, otro grupo de voluntarios quedó a disposición de la Municipalidad capitalina para cubrir otros sectores de ser necesario.
En Oberá, Eldorado e Iguazú se cubrió la totalidad de los cajeros existentes, trabajando de forma coordinada con los bomberos voluntarios de cada ciudad y con la Policía provincial.
Por otra parte, la Subsecretaría de Protección Civil dispuso móviles para asistir a los voluntarios y supervisar las actividades.
Dos días más
En principio, estos operativos preventivos del Ministerio de Gobierno se van a extender dos días más por la alta demanda que también van a tener seguramente los cajeros hoy y mañana.
“A partir de ahí, se analizará la concurrencia para ver si continuamos con presencia policial en todos los cajeros de la provincia o los reorientamos a la prevención en otros sectores”, según confirmó el subsecretario de Seguridad, Pedro Marinoni, a la FM 89.3.
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